Culminó el juicio que tenía a cinco policías, entre ellos el jefe de la Departamental Río Segundo, imputados por el delito de peculado. Todos, estaban acusados de integrar una banda dedicada al robo de autopartes en vehículos alojados en el Depósito Judicial de esa ciudad del Gran Córdoba.

La olla se destapó allá por el año 2018 y fue un verdadero escándalo. Jorge Ricardo López, Jefe de la Departamental y el comisario inspector Marcelo Larrey, están entre los imputados. El tercero fue nada mas y nada menos que quien era en ese entonces el Jefe del Comando de Acción Preventiva (CAP) de Alta Gracia, Gabriel Assolini.

Casi de inmediato, los cinco fueron pasados a situación pasiva en medio de un sumario administrativo. La investigación era por el presunto  robo de autopartes de los vehículos secuestrados por el Poder Judicial, para luego comercializarlos, al parecer, en talleres de la zona.

Sin embargo, cinco años después «se hizo Justicia», así lo describieron los mismos imputados tras escuchar la decisión de la Cámara 12° del crimen, cuyos jueces no hallaron culpabilidad alguna en ningún de los acusados y los absolvió.

La decisión fue por unanimidad y las audiencias contaron además con jurado popular.

«La Justicia determinó su inocencia sin ningún tipo de duda. Por decisión unánime, dictó sentencia absolutoria para estas tres personas de bien y sus dos jefes, los señores Lopez y Larrey, ordenando además que se le de la publicidad correspondiente para mantener a salvo su buen nombre y honor», expresaron sus defensores.

«Seis años después, se hizo justicia», expresaron.

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