El director del Hospital de Villa del Rosario fue imputado por amenazar al guardia de una fábrica, entrar al lugar y matar a un perro con una escopeta. Ocurrió en Laguna Larga. “Defendí a mi familia”, dijo el acusado.
Frecuentemente nos enteramos de personas que, en un ataque de furia, reaccionan de maneras violentas, como en la película argentina Relatos Salvajes.
El último domingo se vivió en Laguna Larga, una pequeña población del departamento Río Segundo, una situación que bien podría haber sido extraída de esa película.
Según denunció el dueño de una fábrica de esa localidad, el director del Hospital de Villa del Rosario, Raúl Leguizamón, ingresó a la empresa Corvial, y luego de amenazar al guardia con una escopeta, mató a un perro de dos tiros. Todo ocurrió el último domingo.
La secuencia quedó grabada en las cámaras de la firma, que difundieron las imágenes por redes sociales.
“Este hombre apareció en mi empresa totalmente sacado. Ingresó a la fábrica. Logró agarrar a uno de los perros y lo mató de dos escopetazos. Después empezó a correr por el lugar y luego a dar vueltas con el cuadriciclo buscando a otros dos perros, pero no los encontró. Estaba muy alterado”, expresó Carolina Carrasquera, dueña de la empresa, en su página de Facebook.
Tras la denuncia, Leguizamón fue imputado por los delitos de coacción agravada, daños y amenazas, según indicaron fuentes judiciales. Además, se le aplicó la Ley Sarmiento, por maltrato animal. La investigación quedó a cargo del fiscal Alejandro Peralta Otonello
Se informó que de su domicilio le secuestraron el arma que habría usado para matar al animal. Según el acusado, fue él quien entregó el arma.
“Defendí a mi familia”
En diálogo con La Voz del Interior, Leguizamón dijo que se arrepentía de haber ingresado a la fábrica, aunque señaló que el damnificado es él y que consultará con sus abogados para demandar civilmente a la empresa.
El médico y director del Hospital de Villa del Rosario explicó que la empresa colinda con un terreno de su propiedad y que vienen con problemas desde hace un año.
“Sus perros se pasan a mi terreno y ya me han matado 4 ovejas, un potrillo y un ciervito. Pedí varias veces que tomen medidas para que los perros no se pasen, pero lo siguieron haciendo”, dijo Leguizamón.
Y agregó: “Esta vez nosotros estábamos entrando a la casa cuando vimos que mataba a otras 4 ovejas y cuando vi que se venían para el lado de la casa y que estaban mis hijos, lo que hice fue defender a mi familia y a mis animales. Herí a uno de los perros y luego me fui a la fábrica”.
El hombre dijo que más tarde se arrepintió y fue a pedirle disculpas al guardia del lugar.
Leguizamón aclaró que los animales de la fábrica son peligrosos y dijo que uno es un Rottweiller.