Desde que se conocieron los resultados de la primera vuelta electoral para definir quién será el próximo presidente de la nación, y se supo que los grandes perdedores fueron los partidos que componen Juntos por el Cambio, comenzó el debate sobre la actitud que tomarán los dirigentes y simpatizantes del radicalismo, del PRO y de las otras fuerzas que componen la coalición derrotada a la hora de emitir su voto el próximo 19 de noviembre, en la segunda vuelta electoral.
Y Córdoba es uno de los territorios más significativos en ese sentido, con una larga historia de afinidad de la sociedad cordobesa con el radicalismo, y siendo definida como la cuna del PRO.
Por estas horas es atronador el silencio de la dirigencia de Juntos por el Cambio en Córdoba que no emiten opinión, o prefieren expresarse sobre cualquier otro tema, pero que no dicen nada sobre lo que harán en las elecciones de noviembre.
Ni Mario Negri, ni Rodrigo De Loredo, ni Luis Juez, tampoco ninguna de las autoridades de la UCR ni del PRO, se expresaron en ese sentido, sin embargo, consultados en off son muchos los dirigentes radicales cordobeses que aseguran que no podrían votar por Javier Milei, a quien consideran alejado no sólo de sus convicciones políticas sino ideológicas, solo un par de dirigentes de segunda línea se atrevieron hasta ahora a hacer pública su opinión.
Uno de estos casos es el del Legislador provincial Dante Rossi que expresó de manera contundente, «Está claro que no hay manera de que yo vote por alguien que insulta a Raúl Alfonsín, intenta privatizar la educación, la salud y las jubilaciones, desprecia a quienes tienen opiniones diferentes y apoya la libre tenencia de armas. Esa Argentina no es la que quiero».
Otro que también se expresó fue el dirigente del PRO Sebastián García Díaz, quien no dijo que hará en noviembre pero si realizó una dura autocrítica sobre el desempeño electoral, «Siento vergüenza por la derrota que hemos sufrido. Le hemos fallado a mucha gente que depositó su expectativa en nosotros En Córdoba Juntos por el Cambio perdió la gobernación, la Municipalidad y ahora la presidencia» dijo el fundador de Primero la Gente.
Y además fue muy duro con el PRO, al que se sumó hace muy poco tiempo, «No podemos demorar ni un día en hacer una muy descarnada autocritica. Todos los partidos y todos los dirigentes. Respecto de mi partido PRO Córdoba, al que decidí afiliarme en el 2020 por invitación de Patricia Bullrich luego de la derrota de Macri, hay que reconstruirlo de cero, porque es una bolsa de gatos. Tuvimos un presidente, Pretto, que nos traicionó. Y tenemos un plantel de dirigentes que no son representativos en Córdoba y lo único que saben es pelearse entre ellos y coquetear o incluso hacer negocios con el peronismo» los cuestionamientos siguen y no hacen más que evidenciar la ebullición que sufre hacia adentro la coalición que era hasta ahora la primera oposición.
Por el lado de la primera línea de dirigencia del PRO de Córdoba, sólo la macrista Soher El Sukaría expresó algunas palabras sobre el desempeño electoral, «Orgullosa del Pro Argentina y de Juntos por el Cambio» dijo la Diputada nacional por Córdoba, «Con los valores intactos seguiremos dando todos los debates por la Argentina que merecemos, gracias Patricia Bullrich, Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal y todo nuestro gran equipo» expresó en un mensaje que pareció más de forma que algún tipo de pronunciamiento elaborado.
Un dato que no es menor en Córdoba es que muchos dirigentes radicales, sobre todo del interior provincial, miran con tentación la posibilidad de distintos grados de acercamiento con el próximo gobierno provincial de Martín Llaryora, y también se muestran interesados por los lazos que puedan tender con el futuro gobierno de Sergio Massa.
Y también es muy posible, y los dirigentes cordobeses de Juntos por el Cambio lo saben, que muchos cordobeses que los votaron hasta ahora, comiencen a decidir su voto de noviembre sin esperar la opinión de quienes conducen los partidos de la coalición.
Fuente: Política Córdoba Verdad