Después de cuatro ofertas, el gremio docente aprobará el lunes la suba del 60%. El Ejecutivo espera por el SEP, que definirá después de sus elecciones internas.

Luego de una semana cargada de idas y vueltas en torno a las discusiones salariales en la provincia, el gobierno cordobés se encamina a bajarle la persiana a los debates del primer semestre, que al ritmo del temor por la disparada inflacionaria parecían complicarle la gestión al oficialismo en las puertas del sprint final de la campaña electoral.

Con el Sindicato de Empleados Públicos (SEP) extendiendo la incógnita hasta comienzos del próximo mes, el schiarettismo clausuró el acuerdo con la Unión de Personal Superior (UPS) y el Sindicato Vial (SiVialCo) y espera por el visto bueno del gremio docente, que llegará el lunes.

La semana comenzó con una reunión en la que la Provincia puso sobre la mesa una mejora en el acuerdo original con el SEP. La oferta amplió la escala que ya empezó a regir en febrero y elevó la pauta semestral del 40% al 50%, contemplando una serie de cláusulas gatillo que se activarían automáticamente en caso de que la suba de precios supere los porcentajes acordados.

Todo parecía encaminarse a un final feliz de rápida resolución hasta que el martes, en medio de la conciliación obligatoria con el sindicato docente, la administración propuso una escala que contempla un aumento escalonado que alcanza el 60%.

Observándose diez puntos por debajo del incremento ofrecido a maestros y maestras, el secretario general del personal estatal provincial, José Pihen, recalculó la estrategia y pateó la respuesta para el 2 de mayo. La razón también responde a una estrategia electoral propia y que apunta al corazón mismo del espacio que conduce.

En el SEP habrá elecciones el próximo 28 de abril. Con dos listas opositoras oficializadas, Pihen no quiere discusiones altisonantes en asambleas que puedan perjudicar al candidato del oficialismo, el actual secretario adjunto, Sergio Castro.

La Provincia tendrá que esperar.

Caso cerrado

En la columna de las buenas noticias que llegan al despacho del gobernador Juan Schiaretti, se anota el acuerdo alcanzado este jueves con la representacións de los gremios UPS y SiVialCo. A tono con los demás ofrecimientos, el gobierno cordobés adelantará al mes de abril el 10% que había sido acordado para junio y agregará un incremento por el mismo porcentual a julio.

El acuerdo contempla también al personal de la Policía de la provincia, Servicio Penitenciario y Fuerza Policial Antinarcotráfico, y al personal de la salud, por su carácter esencial. Además, agrega una “cláusula de garantía del poder adquisitivo del salario” que se gatilla automáticamente si la suba de precios se ubica por encima de los valores negociados. Es decir, si la inflación acumulada entre enero y abril resulta por encima del 40%, la diferencia se sumará automáticamente a los salarios de mayo. El mismo mecanismo se aplicará en julio.

El sindicato docente, por su parte, dará fin a un proceso de discusión que se extendió por más tiempo que el previsto y aprobará el lunes la cuarta oferta del Ejecutivo provincial.

Luego de tres días de asambleas en las escuelas y en las delegaciones regionales, la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) afirma que, “de las 26 delegaciones departamentales, 24 ya culminaron sus asambleas y 19 decidieron aceptar la propuesta salarial”. Con esa base, el lunes se llevará a cabo la Asamblea Provincial de Delegadas y Delegados Departamentales que tomará la resolución final.