El Centro de Almaceneros de Córdoba. entidad que habitualmente releva índices de precios, esta vez decidió incursionar en los sondeos políticos. Según esos números hay una clara ventaja de Juez sobre el diputado radical y marcan un escenario de paridad con el oficialismo en una fórmula conjunta.
Con Martín Llaryora ya lanzado y recorriendo la provincia como candidato del peronismo cordobés, la falta de definiciones comienza a hacer ruido en Juntos por el Cambio. Las idas y vueltas sobre como se resolverá la fórmula, sumado a los movimientos secesionistas de algunos intendentes radicales aumentan la ansiedad especialmente en quien se considera a si mismo como el mejor candidato para destronar al peronismo del poder.
Que se resolvería a través de encuestas, que a través de internas abiertas, de internas cerradas, con un reglamento o sin él, etc, se estiran los tiempos de definición y Luis Juez ya quisiera estar en la cancha como candidato puesto y salir a mostrarse con el traje de candidato. Pero tiene muchas resistencias dsentro y fuera de Juntos.
En medio de estas indefiniciones sorprendió este fin de semana la aparición de una encuesta, que Juez le habría acercado a De Loredo, realizada por el centro estadístico del Centro de Almaceneros de la ciudad de Córdoba, una entidad que habitualmente se dedica a medir la inflación, que ahora sorpresivamente se anima a incursionar en lo político; que le darían al actual senador nacional una ventaja clara sobre el diputado de Evolución. Con esos números sobre la mesa, Juez intentará que el radical De Loredo decline sin interna su precandidatura a gobernador; ya sea para ser el candidato a intendente o bien para secundarlo en la fórmula como vice.
Según reconocieron desde el Centro de Almaceneros, el estudio se basa en un relevamiento con 600 casos presenciales y 170 telefónicos todos en la ciudad de Córdoba. De acuerdo a esos resultados, medidos individualmente Llaryora le saca casi 10 puntos a Juez, pero cuando se miden fórmulas una compuesta por el senador nacional y Rodrigo de Loredo se pondría en paridad frente a otra que reuna al intendente capitalino secundado por Natalia de la Sota.
La encuesta señala que en voto individual, Llaryora cosecha 37,2 por ciento; Juez, 29,9 puntos; De Loredo 12,6; el vecinalista Aurelio García Elorrio tendría 6 puntos; y Martín Gill quedaría con menos de 0,5. En el medio están la Izquierda y los libertarios. Cuando consultaron por intención de voto por partido, Juntos por el Cambio pasó al frente, con 40,8 por ciento; con casi 6 puntos de ventaja sobre Hacemos por Córdoba; mientra que Encuentro Vecinal (García Elorrio) mantendría su 6 puntos y el Frente de Todos lograría apenas 2,7, por encima de la Libertad Avanza, que tendría menos de 2.
La tercera pregunta -y con la que buscan limar la candidatura a gobernador de De Loredo- fue por intención de voto por fórmula. Aquí es cuando se da el empate entre Llaryora-De la Sota y Juez- De Loredo, con 40 puntos cada binomio; mientras que Encuentro Vecinal se consolidaría como tercera fuerza con casi 7 puntos, en una fórmula integrada por García Elorrio y el concejal Juan Pablo Quinteros.
Cuando los encuestadores invirtieron el orden de la fórmula de Juntos por el Cambio, es decir De Loredo-Juez, la intención de votos medida en este sondeo cayó a 36,8 por ciento; mientras que la de Llaryora-De la Sota trepó hasta los 43 puntos.
Desde las tradicionales empresas encuestadoras de la provincia y tambien en círculos políticos del peronismo y del propio radicalismo salieron a bajarle el precio al sondeo y hasta hablan de un acuerdo de Juez con Germán Romero, director del Centro de Almaceneros de Córdoba para, con estos números tratar de inclinar definitivamente la balanza de su lado y definir antes de febrero que él será el candidato de Juntos.
Juez desconfía. De algunos radicales, del mismo De Loredo, y especialmente de Mauricio Macri. Sabe que van a intentar jugar todas las fichas para mantener un acuerdo de más de dos décadas con el cordobesismo y por eso pretende definir su candidatura cuanto antes para que no lo vuelvan a “dormir” antes de tiempo.