Mientras Convergencia reunió a su tropa de forma virtual, en Sumar se quejan por el accionar de la Junta Electoral que hoy confirmó que se vota el domingo. Aunque no habría que descartar del todo una postergación

Idas y venidas, caras de pocos amigos y la apelación a cualquier ardid para sacar ventajas sobre el adversario interno, es el clima que se vive por estas horas en la Unión Cívica Radical de Córdoba, a 5 dias del domingo 14 de marzo, fecha fijada para la compulsa domestica.

La decisión del juez federal Ricardo Bustos Fierro de habilitar a Rodrigo de Loredo para competir, ocurrida hace un par de dias, pone a ambos nucleos internos en una encrucijada: prepararse para una batalla que en el fondo nadie quisiera tener que enfrentar. Y por eso usan todo lo que tienen a su alcance para tratar de arrimar agua para sus molinos.

El sector de Convergencia que lleva como candidato a presidir el Comité Provincia al intendente de General Cabrera, el negrista Marcos Carasso, secundado por la mestrista Liliana Ruetsch, intendenta de Ticino, y por el alfonsinista de Identidad Radical, Martín Lucas, realizo este domingo una teleconferencia con dirigentes de toda la provincia (dicen que mas de 300), para delinear toda la logistica por si no hay mas remedio que ir a votar.

Desde Sumar que propone para el Comite Central a Rodrigo de Loredo, de Marea Radical, junto a la intendenta de Monte Cristo, Verónica Gazzoni, de Línea Córdoba y al lider de Fuerza Renovadora, Miguel Nicolás, se quejaron por la dilacion en los tiempos para la oficializacion de los votos por parte de la Junta Electoral partidaria dominada por el oficialismo, y pidieron que se corra la fecha de la interna “una o dos semanas más para enmenadar el daño” que le habría causado a la alianza la apelación que finalmente resolvió el juez electoral Bustos Fierro. Desde la Junta afirmaron que la Resolucion del magistrado no tiene efectos suspensivos sobre el cronograma electoral.

A pesar de eso, los dos espacios se ilusionan con al menos una semana más de campaña: De Loredo, para que “se garantice la participación de Sumar en la interna, como ordenó el juez”; Convergencia, de Mestre y Negri, para que baje la espuma del fallo de Bustos Fierro.

Pero tal como lo señala el colega Juan Gonzalez en el sitio LPO, lo que ambos sectores temen es que pase lo peor: no lograr que 22 mil radicales, es decir el 10 por ciento del padrón, voten; un requisito de la carta orgánica que si no es cumplimentado puede implicar la nulidad de la elección. Lo que sería un verdadero papelón.